- Vélez Manzanares
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Guadalmez se erige como un ejemplo de cómo el clima y el ecosistema pueden ser aliados fundamentales para la agricultura y las actividades humanas. Este pequeño municipio, ubicado en una región privilegiada del centro-suroeste de la Península Ibérica, cuenta con un microclima mediterráneo-continental que lo convierte en un lugar ideal para el cultivo del olivo y otras actividades agrícolas.
Un clima que marca la diferencia
Guadalmez disfruta de inviernos suaves y veranos cálidos, con temperaturas que oscilan entre los 10°C y los 35°C habituales. Las lluvias, aunque moderadas, se concentran en otoño y primavera, lo que permite una hidratación natural del suelo en los momentos clave para el desarrollo de los cultivos.
Este equilibrio climático favorece especialmente al olivo, una planta resistente pero exigente en términos de calidad del suelo y condiciones ambientales. Además, los suelos de Guadalmez, ricos en minerales y con buena capacidad de drenaje, complementan perfectamente este clima. La combinación de estos factores permite obtener productos agrícolas de alta calidad, como el aceite de oliva virgen extra que caracteriza a Aceites Vélez Manzanares.
Beneficios para la agricultura y la comunidad
El clima no solo beneficia a los cultivos, sino también a las personas que trabajan en ellos. Las condiciones favorables reducen la necesidad de riego intensivo, lo que disminuye los costos operativos y contribuye a una agricultura más sostenible. Por otro lado, el ciclo climático permite planificar las labores agrícolas con mayor precisión, desde la poda hasta la cosecha, optimizando el tiempo y los recursos disponibles.
A todo esto contribuye, además, que el valle sea atravesado por el río Guadalmez, un eje vital que riega las tierras y regula el clima de la región. Este curso fluvial, con su calidad de aguas y régimen hídrico estable, no solo asegura la hidratación de los suelos durante las estaciones más secas, sino que también actúa como moderador térmico, creando un microclima único en la Comarca de Almadén. En sus márgenes crecen fresnos, álamos y sauces que enriquecen la biodiversidad local, mientras que sus aguas sostienen una agricultura próspera.
Este equilibrio natural es fundamental para la producción de los aceites de oliva virgen extra de Aceites Vélez Manzanares, cuyos olivares se benefician directamente de las bondades del río y su entorno ecológico En este contexto, Aceites Vélez Manzanares ha sabido aprovechar al máximo estas ventajas naturales para producir aceites excepcionales como el Arbequina, Hojiblanca, Coupage, Ecológico y Gourmet, cada uno con características únicas que reflejan la riqueza del entorno donde se cultivan sus aceitunas.
Preparándonos para el futuro
A pesar de las ventajas climáticas actuales, es esencial adaptarse a los retos que plantea el cambio climático. En Aceites Vélez Manzanares estamos comprometidos con prácticas agrícolas sostenibles que protejan este valioso ecosistema y garanticen su productividad para las generaciones futuras. Guadalmez no es solo un lugar; es un entorno donde clima y tierra trabajan juntos para crear productos excepcionales que llevan consigo el sabor auténtico de nuestra región. Descubre más sobre nuestra historia y nuestros aceites pinchando en la imagen inferior: